viernes, 23 de abril de 2010

Intermediando

Hace días que el debate flota en el aire acerca de las nuevas tecnologías y los cambios que han sufrido las nuevas formas de comunicarse y por extensión los medios que se dedican a ellos, estos días google (lo pongo en minúsculas de manera deliberada) ha publicado el ranking de los países que más impedimentos le ponen a su mayúsculo negocio.

Da igual el lugar que ocupe nuestro país o los temas que ellos consideren más vetados, literalmente no tienen vergüenza, están aprovechando una extrañísima corriente de "no opinión" acerca del funcionamiento, del buen rollo, de la transparencia y del "open mind" del gran G.

Los que trabajamos en esto sabemos que no hay ni una sola empresa en internet que no trabaje de manera indirecta a nivel costes para G pero todas lo hacemos de manera directa para los ingresos, es la puta gran dictadura.

¿Os acordáis de su nacimiento?, de su página blanca con el buscador en medio?, con su cronómetro en el lado izquierdo que acompañaba con el número de búsquedas reales al lado?, pues amigos lo queramos ver o no, esto ha cambiado, el gran G que diría Orwell es una gigantesca y perfectamente bien engrasada máquina de ganar dinero.

Dije que no iba a hablar de ellos hoy, pero las tripas me pueden, trataré de continuar con mi pensamiento inicial, que no son otros negocios que se engloban dentro de las agencia y centrales de compras de publicidad.

Putos cómplices del gran G y seguidores/seguidistas al menos en España de Nielsen, otro que nos suena a todos y que hasta hace unos años sólo era el puto primo del Rudolf (ya sabéis el reno gay de Papa Noel)

sábado, 20 de marzo de 2010

Pensando en mi fracaso

Llevo días, que digo días quizá meses e incluso años trabajando a tope sin pensar en más allá que estar sano y fuerte para seguir trabajando y que nada altere el ciclo productivo del que formo parte de una manera activa.

Digo que trabajando a tope sin pensar porque no pienso, no pienso en nada que no sea lo anteriormente descrito, curiosamente hoy, quizá ayer o quizá hace tiempo que trato de pensar, sé que tengo que pensar en porqué hago todo esto pero algo me impide parar, templar y pensar en todo este círculo diabólico de trabajar, producir, pagar, crear, no destruir, seguir para poder pagar y poder seguir consumiendo al mismo tiempo que aumenta mi miedo a no poder pagar y por tanto no pertenecer al círculo.

Hace unos días la empresa para la que trabajo me pago un bono anual por el esfuerzo de todo un año, un esfuerzo de verdad, todo el mundo que trabaja por un bono anual sabe a que me refiero, rara vez se consigue, pero bueno este año lo he conseguido y estaba ilusionado por ir a mi cajero, sí mi cajero porque todos son nuestros cajeros, todos cobran por lo tanto todos son tuyos y observar el papelito delgadito que te escupe la maquinita y como digo comprobar si mi cuenta corriente había aumentando............, efectivamente había aumentado no tanto como imaginaba, no se correspondía lo que me habían dicho que iba a cobrar con lo que había en el papelito, entonces caí en la cuenta que me faltaba otro papelito, el de Hacienda que casi en la misma proporción que mi cuenta había aumentado la suya gracias a mi esfuerzo y sin hacer nada, sólo tenía que esperar.

Este momento junto a otro que he vivido esta mañana mismo me han llevado a la conclusión de que de verdad he fracasado en la vida, que lo he hecho mal, me explico.

He recibido otro papelito esta vez amarillo de los que manda correos, esos tan intimidantes que periódicamente recibimos en casa y que te trae un tío con un casco amarillo y vespa y que como nunca estás en casa (cuando aprenderán a notificar de otra manera), porque los que producimos nunca estamos en casa, pero como decía he ido a Correos a ver que había hecho esta vez y me han entregado un pedazo de sobre con un montón de advertencias y artículos que finalmente dicen que o pagas no se cuánto más de tu declaración de hace unos años o te embargan......

Sumando el momento cajero y el momento Correos, comprendí que mi fracaso era de proporciones épicas porque no había conseguido dejar de trabajar un sólo día y por tanto producir en lugar de de ganar un sueldo decente pero que me permita estar más tiempo en mi casa con los míos, poder dormir sin tomarte los Lexatines como si fueran Lacasitos, dejar de pensar en como mejorar para poder producir más, porque finalmente te pongas como te pongas es mejor tener un par de empleos de los que te pagan poco pero son de los oscuros, de los de no se declararan y a estos sumarle cualquiera de las ayuditas que Bamby tiene listas para toda la gente que previamente ha mandado al paro, si sumase estas tres cantidades seguro que me podría apañar y ser un vecino más de mi barrio de los que se relacionan y se conocen todos, sabría a que clase va a mi hijo sin dudarlo cada vez que me lo preguntan y si esta año actúa de romano o de cristiano en el cole. Ganaré menos?, no lo sé pero cada vez que vea a uno de Correos todo mi miedo será si me han vuelto a dar la ayudita y los bonos que comparta con Hacienda sean del Monopoly.

Me lo pensaré.

Mientras tanto seguiré trabajando, produciendo y pagando hasta que consiga todo lo anterior.